Con cada desarrollo industrial, tecnológico o cualquier otro tipo de avance ha ido asociado un cambio en algunas – si no en todas – las facetas de la sociedad. Evolucionamos, cambiamos y nos adaptamos a nuestro entorno. Por ello, el uso de la tecnología en la educación puede ser considerado como un desarrollo natural de innovación y cambio en las aulas.
Esta tendencia ya se empezó a ver hace unos años, en muchos centros de enseñanza secundaria se empezaron a introducir los ordenadores portátiles, pero con la pandemia y el confinamiento, este uso tecnológico y la importancia de la conectividad se hicieron mucho más evidentes, prácticamente imprescindibles.
Importancia actual
Las tecnologías de la información, conocidas como TIC, trajeron consigo la posibilidad de estudiar en línea. También, las personas recurrimos con frecuencia a nuestros dispositivos para aclarar nuestras dudas en la red, incluso podemos acudir a conferencias y clases a través de videollamadas. Gracias a estas, aprender es más fácil, cómodo e, incluso, asequible.
La introducción de las tecnologías en el mundo laboral, en aumento desde los últimos años, ha hecho que resulte de vital importancia (por doble partida) formar a las nuevas generaciones en su uso. Para conseguirlo, la figura de los docentes es trascendental. La tecnología cobra un valor educativo cuando pasa por las manos de una profesora o profesor, y este genera una guía de aprendizaje. Sin ellos, su uso en casa se puede reducir únicamente al entretenimiento.
La tecnología cobra un valor educativo cuando pasa por las manos de una profesora o profesor.
Sus ventajas o beneficios
Las generaciones que se encuentran ahora mismo en edad escolar ya son nativas digitales. Por ello, no deben enfrentarse a las dificultades de aprendizaje y adaptación a las que han tenido que hacer frente los grupos que no han dispuesto de estas tecnologías desde la infancia.
Por tanto, hacer uso de las TIC en las aulas no resulta una nueva dificultad para ellos, sino una oportunidad, y nuevas ventajas, ya que:
- Permite el desarrollo de nuevos métodos de enseñanza
Como consecuencia de la introducción de la tecnología en las aulas, se han puesto en marcha modelos de enseñanza que tratan de mejorar la calidad de aprendizaje de los estudiantes, como por ejemplo el método de aprendizaje por proyectos, siendo este uno de los más valorados en la preparación de los estudiantes para afrontar retos actuales y futuros. En este método, el papel de la tecnología es fundamental.
- Fomenta el trabajo en equipo y la comunicación
Gracias a las tecnologías, los estudiantes pueden interactuar desde diversas plataformas y colaborar entre ellos. Además, también pueden comunicarse con facilidad con sus docentes y buscar soluciones e informarse en línea. El acceso a materiales didácticos es más sencillo a la vez que potencia las capacidades digitales del alumnado.
Por tanto, las TIC resultan efectivas y prácticas para el intercambio de ideas, materiales y la presentación de trabajos en grupo (con el uso de foros, salas de reunión, materiales para exponer, etc.).
El acceso a materiales didácticos es más sencillo a la vez que potencia las capacidades digitales del alumnado.
- Aportan flexibilidad y capacidad de adaptación
A través del uso de las tecnologías, se implementan modelos que se pueden ajustar con mayor facilidad a las necesidades de estudiantes y familias. Una de las principales ventajas es la ayuda que aporta a aquellas personas adultas que quieren estudiar, pero que necesitan compaginar-lo con su vida familiar y/o laboral. Gracias a estas, pueden adaptar mejor sus horarios.
Además, la posibilidad de conectarse y desarrollar sus actividades a través de medios digitales afianza buenos hábitos en los estudiantes, ya que les ayuda a desarrollar la autodisciplina, su autonomía y les enseña a gestionar el tiempo.
- Desarrolla el pensamiento crítico
Utilizar estas herramientas hace que los estudiantes se encuentren con grandes cantidades de información y fuentes diversas. Una oportunidad que ofrece hacer uso de las TIC es aprender a seleccionar aquella que sea más adecuada y mejor para desarrollar nuestras actividades. Gracias a esto, el alumnado desarrollará un pensamiento más crítico.
- Mejora de la comunicación
La comunicación mediante herramientas tecnológicas es rápida, ágil y muy efectiva. Podemos compartir información con el tejido educativo tanto de forma escrita como verbal. Además, también permite compartir archivos que pueden complementar el aprendizaje, lo que resulta de gran ayuda para los docentes, facilitando el aprendizaje a distancia.
Además, otro elemento muy importante son los padres. Los maestros pueden comunicarse con ellos con mayor facilidad gracias a estas herramientas, que nos pueden ahorrar tiempo en desplazamientos (y también dinero).
El futuro de las tecnologías en las aulas
Implementando el uso de las tecnologías en los espacios educativos, ayudamos a que los nativos digitales se estimulen más por su proceso formativo y ahonden en temas relacionados con la innovación, el emprendimiento y habilidades tecnológicas. Todos estos, son claves para afrontar los retos futuros.
La aplicación de nuevas tecnologías en el aula, en cualquier etapa escolar y de formación, es un hecho imprescindible para poder adaptarse a las nuevas necesidades y formas de vida de las nuevas generaciones. Por ello, la tendencia de aquí en adelante es seguir creando guías de aprendizaje que incluyan estas herramientas tan conocidas – pero poco exploradas – por los nativos digitales.